Resumen: En el estilo empático de relación se acepta la voluntad de quien escucha. Le interesa más la persona que la tarea o situación. Es imprescindible para la instauración de una relación positiva. La empatía desde el punto de vista emocional crea cercanía y vinculo, sentirse comprendido y aceptado. El profesor debe aprender a manejar el estilo empático.

En el estilo empático de relación se acepta la voluntad de quien escucha y además se dirige a su persona, muestra interés directamente por la persona. Le interesa más la persona que la tarea o situación. En el caso del profesor le interesa más el alumno que lo que ha sucedido.

El estilo empático se produce cuando el profesor se interesa en directo por los sentimientos del alumno, por cómo se siente con lo que le sucede. Se basa en el respeto y aceptación de los sentimientos del alumno y es la clave para la creación de vínculo con él.

El estilo empático es uno más entre los que un profesor tiene a disposición y no debe ser el único, pero su presencia es imprescindible para la instauración de una relación positiva. Su ausencia crea distancia y falta de confianza. En la profesionalidad de un profesor sería intolerable que diga algo que pueda dañar a un alumno, que le duela en sus sentimientos.

La empatía desde el punto de vista emocional crea cercanía y vinculo, sentirse comprendido y aceptado. Esto posibilita la apertura entre las dos personas y el dialogo realmente auténtico entre ellas. La confianza está reñida con el engaño, algo importante para las dos partes.

El profesor debe aprender a manejar el estilo empático, no basta lo que la vida le haya enseñado, debe adquirir herramientas concretas, se trata de un campo de comunicación en el que se ha avanzado mucho y no es de recibo que un profesor no adquiera esas herramientas que son tan claves en su profesión.

Además en el tipo de cultura que vivimos el comportamiento empático no es espontáneo, sino que precisa de la intencionalidad directa de interesarse por la persona, a sentir empatía por ella. Empatía significa ponerse en el lugar del otro, detectar su sentimiento y respetarlo. No es lo mismo que sentir simpatía por alguien, que implica sencillamente cercanía afectiva que propicia una identificación con cómo se siente la persona. La empatía precisa una actitud de escucha activa y de aprendizaje diario.

Existen personas que han incorporado la empatía como parte importante de su estilo de relación y habitualmente ponen atención a los sentimientos de las personas con quienes se relacionan. Esto es exigible en algunas profesiones y necesario en muchas, singularmente las que tiene mucha densidad de trato personal y una atención directa a la persona, como es la educación.