La intensidad y la gestión de la emoción

Cuando nos acercamos a una emoción hay 3 dimensiones que se pueden distinguir fácilmente: energía, agrado-desagrado, agresión-igualdad-sumisión. Estas 3 dimensiones nos permiten una clasificación de las emociones. […]

Las necesidades del ser humano y el sistema emocional

Las necesidades del ser humano son variadas y complejas, formando todo un sistema que interacciona. Abraham Maslow lo dejo reflejado en la pirámide que lleva su nombre. Lo que no aparece en la pirámide es el detector emocional de cada necesidad. Y sin embargo debajo de cada emoción hay una necesidad. La clave de la gestión en Educación Emocional es llegar a descubrir precisamente cuál es la necesidad que se encuentra debajo de cada emoción. […]

Un caso de bajo rendimiento escolar en primaria

Marta Bermudez. Licenciada en psicología con formación en Orientación Educativa, Inteligencia Emocional, Psicoterapias y Coaching. EMOTIVA Centro para el Cambio. www.emotivacpc.es La inteligencia emocional, podría resumirse como la capacidad que tenemos para identificar y gestionar nuestras emociones y las de los demás. Las emociones están en nosotros y nos acompañan a cualquier parte (al trabajo, al parque, al cole…). […]

Aceptar

Resumen: la aceptación es un paso de la gestión emocional, un paso necesario, ineludible, que nos pone en disyuntivas vitales, las que van a ir conformando nuestra vida, su trazo biográfico. Aceptar la emoción es uno de los pasos de la gestión emocional. Es un paso que no se puede sortear y de los primeros, pues abre el camino a la gestión. Es el paso que introduce a la persona en su experiencia y da la posibilidad de convertir a esta en positiva. Sin esta aceptación las experiencias siguen siendo algo que nos ha pasado, que incluso nos ha golpeado, que podemos llegar a sentir que incluso nos ha destruido, pero no podemos manejar lo que nos pasa. La aceptación nos introduce en la realidad, nos indica el camino hacia ella, y no podemos vivir fuera de la realidad. […]

Las emociones en la tercera edad: un apunte

Mi amiga Kenia Navarro me ha pedido algo sobre emociones en la tercera edad y he descubierto una laguna importante de este blog: no hay nada escrito sobre ese tema en el blog. Ciertamente nos hemos centrado en la etapa educativa, pero no deja de ser importante. Yo desde luego no tengo experiencia salvo la personal en el tema, pero me voy a atrever a hacer un apunte esperando que si alguien me lee y es especialista y tiene experiencia en el tema se anime a colabora conmigo en el blog. Primera idea: es una época en la que la inseguridad va creciendo, esto hace que la persona vaya progresivamente viendo crecer el miedo (como emoción básica): a la pérdida de salud, a la pérdida de habilidades, a la seguridad con que antes hacía las cosas, etc. Con el dinero, en vez de funcionar, como podría pensarse, teniendo en cuenta, objetivamente de sus posibilidades y, por ejemplo, en un caso en que una persona tenga un buen patrimonio y una buena pensión, y cualquier observador externos juzgaría que tiene de sobra y que gaste para vivir bien, el anciano no, se hace conservador, si no lo justifica para sí mismo lo hace “para garantizar el futuro de los hijos”, en resumen, no quiere gastar aunque pueda. Su sentimiento le hace juzgar desde su vida (ese es el papel de las emociones) y en su vida ha crecido el miedo, la preocupación, la inseguridad, ha perdido facultades y siente que no domina la situación y el futuro como antes. […]