Verónica Prieto Montes. Pedagoga. Máster en intervención con dificultades de aprendizaje en ISEP. Colabora con AMACAE (asociación madrileña contra el acoso escolar) y desarrolla la implantación del programa de prevención de acoso escolar TEI en los centros educativos de la Comunidad de Madrid.
Muchas son las voces que están saliendo tras las actuaciones que están poniendo en marcha tanto la Comunidad de Madrid como el gobierno español en materia de acoso escolar estos días. Ahora urge rasgarse las vestiduras contra el acoso escolar, ya que con la ayuda de los medios de comunicación se está viendo que el modelo educativo y protocolos actuales dejan mucho que desear en ocasiones. Evidentemente estas actuaciones están muy relacionadas con la muerte de los adolescentes que durante 2015 decidieron no soportar más el acoso al que se veían sometidos sin que nada ni nadie pusiera remedio.
A simple vista y de cara a los ciudadanos, se puede percibir una preocupación por el tema, ya que la presentación de las líneas de actuación del plan de gobierno puede resultar atractiva y favorecedora de intercambios y cooperaciones para que se luche hacia el mismo sentido, pero llevarlo a la práctica sin dotar medios ni recursos y sin adentrarnos en cada una de las líneas que se proponen, ya no es tarea fácil. Para comenzar, el plan estatal de convivencia de 2005 fue consensuado por representantes políticos, profesores, padres y alumnos y en él se acordó la puesta en marcha de un Observatorio Estatal de Convivencia Escolar integrado por toda la comunidad educativa que empezó en 2007. Durante los cuatro años de gobierno de Rajoy se paralizó el observatorio haciendo caso nulo al acoso escolar; y ahora en “cuatro días” y sin la posibilidad de un gobierno estable, se presenta un nuevo plan para que no se le pueda tildar de no haber hecho nada sin tener en consideración a los sindicatos de profesores, a la confederación de asociaciones de padres y madres, ni a los estudiantes.
Las acciones de difusión y sensibilización de la sociedad es un paso más de algo que ya se debería hacer hecho antes, se trata de una pata más de todo el entramado de acciones que se deben desarrollar en nuestro país.
En cuanto al teléfono gratuito contra el acoso escolar, es una iniciativa más, pero si ya en la violencia de género no se ha utilizado todo lo esperado, tratándose de adultos, cabe esperar que en estos casos con niños se haga menos, no olvidemos que además en primaria existe más acoso que en secundaria (según datos del informe Cisneros X y el informe ejecutivo del Gobierno Vasco de 2012).
En cuanto a la guía de padres, se debería de informar también cómo detectar que tu hijo pueda ser un acosador y saber actuar en consecuencia. El problema no lo provoca la víctima, sino el acosador y evidentemente también necesita ayuda para aprender a relacionarse de forma no violenta.
Bienvenido sea el registro estatal de convivencia que propone el gobierno, tan sólo me gustaría saber de donde y cómo van a obtener esa recogida de datos estadísticos que ofrecerá una información tan rigurosa y actualizada a nivel nacional y tan necesaria.
En los itinerarios de formación del profesorado igualmente se deben de dar pautas de cómo actuar no sólo con las víctimas, sino también con los acosadores. Pero no olvidemos que la formación también debería de ir dirigida a todos los participantes que intervienen en un proceso de acoso escolar: pediatras, psiquiatras, psicólogos, trabajadores sociales, pedagogos, policías, inspectores de educación, jueces, fiscales, etc. que en ocasiones parece que adolecen de ello. Y ya que hablamos de formación, he echado en falta una mención a la formación en inteligencia emocional y valores a nuestros alumnos pero también a todos nuestros docentes, algo que veo fundamental para sentar unas bases reales sobre la convivencia y la prevención del acoso en la escuela.
Para ser justos no en todo hay que culpabilizar al Gobierno, la educación de los padres hacia con sus hijos es fundamental. Nos encontramos ante familias en las que los padres no pasan tiempo con sus hijos y se sustituye ese tiempo consintiéndoles todo y sin unas normas claras. Hace unos días, me llamaba la atención la noticia de cómo unos padres de acosadores en Gerona amenazaban con denunciar al centro escolar por la expulsión de sus hijos unos días del centro, tras un episodio de ciberbullying demostrado por la víctima. Estos padres puede ser que algún día reciban de su propia medicina y esa violencia se ejerza contra ellos.
Para finalizar, considero, que al igual que pasa con el test online de la Comunidad de Madrid, el foco de atención se está poniendo en la víctima, que parece que tipificándola se justifica el acoso escolar, pero nadie es agredido sin un acosador o grupo de acosadores, que en la mayoría de los casos salen impunes y con muchas probabilidades de seguir manteniendo sus agresiones porque no existe un modelo que piense en la reeducación.
Bibliografía y Webgrafía.
- Barón. 2016. Así es el test contra el acoso escolar que ha lanzado la Comunidad de Madrid. Lainformacion.com http://noticias.lainformacion.com/educacion/asi-es-el-test-contra-el-acoso-escolar-que-ha-lanzado-la-comunidad-de-madrid_ZCt3ARGKhiwyTwAAsyaYY5/ (fecha de acceso: 27 de enero de 2016).
Informe ejecutivo 2012. 2012. El maltrato entre Iguales en educación primaria y secundaria. Bilbao: Isei. Ivei. Gobierno Vasco.
Lavanguardia.com. 2016. Ciberbullying en niños de nueve años. http://www.lavanguardia.com/local/girona/20160203/301865681908/ciberbullying-ninos-girona-whatsapp.html (fecha de acceso: 4 de febrero de 2016).
Oñate, A. e I. Piñuel. 2007. Informe Cisneros X. “Acoso y violencia escolar en España”. Instituto de innovación educativa y desarrollo directivo.
Leave A Comment